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Aportes Voluntarios sin Fin Previsional: una alternativa de inversión

Agosto 7th, 2017 by

En el mercado financiero existe un abanico de posibilidades para hacer crecer tu dinero. Dentro de estos productos deberían incluirse los aportes voluntarios sin fin previsional que las administradoras ofrecen a sus afiliados.

Invertir en AFP es una alternativa confiable.

Al mes de agosto del 2017, los resultados de los fondos del Sistema Privado de Pensiones (SPP) fueron positivos. Esto se demostró al estar rankeados dentro de los mejores rendimientos del mercado.  Al invertir en AFP, los aportantes obtuvieron una rentabilidad por encima de la estimada durante los doce meses previos a la fecha mencionada.

Desde hace cuatro años, el equipo de inversiones de AFP Habitat viene trabajando para mantener el liderazgo en rentabilidad, así poder ofrecerte el mayor beneficio por tus aportes. Recuerda que no importa en qué AFP estés, puedes hacer tus aportes voluntarios sin fin previsional en cualquiera de las administradoras.

Para hacer aportes voluntarios sin fin previsional debes tener cinco años de afiliado al SPP y abrir una subcuenta.

¿Cuáles son las ventajas de hacer Aportes Voluntarios sin Fin Previsional?

  • No hay un monto mínimo de inversión, pues puedes aportar cuánto desees
  • No se necesita fijar un plazo mínimo para dejar tu fondo en la AFP
  • Solo se aplica una comisión al saldo
  • Puedes retirar y depositar dinero las veces que quieras
  • No hay cargo por ingresar ni por retirarse
  • El afiliado puede hacer aportes voluntarios en cualquier AFP independiente de dónde esté afiliado

¿Qué más debo saber para invertir en AFP?

La información de comisiones y rendimientos es absolutamente pública, se encuentra en la página web de la Superintendencia de Banca, Seguros y AFP. En esta misma página se puede evaluar la AFP que ofrece el mejor rendimiento y la menor comisión. Así, puedes elegir la mejor alternativa.

La evaluación de qué alternativa es la más adecuada, es el primer paso porque verás quién ofrece un mejor rendimiento. Si decides invertir en aportes voluntarios sin fin previsional, entonces debes contactar con la AFP para que te asesoren en el trámite.

La regla de Taylor en política monetaria

Agosto 3rd, 2017 by

La regla de Taylor, es una herramienta muy utilizada en política monetaria para definir el nivel de la tasa de interés de referencia. De manera simplificada, esta regla explica el nivel de la tasa de interés en función de 2 variables. La primera es la diferencia entre el crecimiento del PBI potencial y el crecimiento estimado del PBI. El crecimiento del PBI potencial es aquel que debería tener el país para que no se afecte el empleo y el bienestar social. Mientras mayor sea la diferencia entre estos crecimientos, mayor sentido tendría una política monetaria activa. Una bajada en la tasa de interés debería tener un efecto reactivador en la economía.

La segunda variable, y es la que normalmente hace al banco central actuar con más cautela cuando busca aplicar una política monetaria expansiva, es la brecha de inflación, medida como la diferencia entre la inflación objetivo del banco central y la inflación proyectada para los próximos meses. En caso la inflación proyectada se encuentre muy por encima del nivel objetivo, el banco central no podría bajar la tasa interés para estimular el crecimiento, sino por el contrario, tendría que subirla para forzar a que la inflación esperada disminuya y se acerque a su objetivo, a pesar del efecto negativo que podría tener sobre el crecimiento.

En el contexto actual, el crecimiento estimado del PBI ha sido revisado considerablemente a la baja, con una brecha de cerca de 1.5% con respecto al PBI potencial, principalmente por la paralización de la inversión. Adicionalmente la viabilidad de aplicar un estímulo fiscal es complicada, principalmente por problemas de capacidad y velocidad de ejecución. Por ello la política monetaria expansiva podría ser una opción para darle impulso a la demanda interna.

Por el lado de la inflación, felizmente, esta parece estar controlada, y desde ya varios periodos se encuentra convergiendo hacia la banda objetivo del banco central. Adicionalmente, el tipo de cambio, que es un canal importante por el cual una subida del dólar se traslada a la inflación, está controlado e inclusive muestra una tendencia hacia el fortalecimiento del sol. Ello en un contexto de moderación en las expectativas de subidas de tasas por parte de la reserva federal de EEUU.

Ante las menores exceptivas de crecimiento económico y la moderación de la inflación, el banco central ha venido aplicando una serie de estímulos monetarios. Primero empezó reduciendo la tasa de encaje, con el fin de flexibilizar las condiciones crediticias en el sistema financiero. Posteriormente continuó con la reducción de la tasa de referencia en dos oportunidades. En los próximos meses, es posible que el banco central continúe con los estímulos monetarios en la medida en que la inflación se siga situando dentro de la banda objetivo, y en la medida en que el contexto internacional continúe siendo favorable. Ante una tendencia de depreciación del dólar y una relativa estabilidad de la política monetaria de EEUU, el banco central podría tener espacio para seguir aplicando una política monetaria expansiva, que podría ayudar al crecimiento económico mientras llegan los estímulos fiscales.

Política monetaria vigente

Julio 20th, 2017 by

El año pasado, el economista Mohamed A. El-Erian publicó el best seller denominado “The only game in town”, haciendo referencia al papel que estaban teniendo los bancos centrales en el mundo para sostener el crecimiento económico. En él argumenta, entre otras cosas, que muchas economías desarrolladas han dependido en gran medida de las operaciones de los bancos centrales para sostener el crecimiento económico y al mismo tiempo la fortaleza de los mercados financieros. La tesis recoge gran parte de la dinámica de los mercados casi desde la crisis financiera del año 2008.

Sin embargo, con la elección de Donald Trump en EEUU, el consenso sobre la vigencia de dicha tesis cambió. Se pensaba que las condiciones de mercado podrían variar considerablemente ante el fuerte estímulo fiscal ya sea por reducción de impuestos o por gasto en infraestructura en EEUU, la desregulación de algunos sectores y el proteccionismo comercial que planteaba la propuesta económica de Trump. Ello debería generar un surgimiento de la inflación en EEUU y un fortalecimiento del dólar. Ante dicho escenario, surgió el denominado “Trump Trade”, con un crecimiento bastante fuerte en el precio de los activos que se podrían beneficiar con el nuevo régimen económico. En este contexto, también el papel de los bancos centrales en el orden económico perdería cierto protagonismo, quienes además estarían prontos a acelerar el retiro de los estímulos monetarios.

Con el paso del tiempo, las propuestas económicas de Trump empezaron a causar desilusión, en algunos casos por la falta de ideas concretas para materializarlas y en otros por la inviabilidad política para implementarlas, principalmente por la oposición del congreso de su propio país. Entonces, los retornos esperados de los activos que más se hubiesen beneficiado con el “Trump Trade” empezaron a converger.

Por el lado de la economía real, si bien el crecimiento económico sí se está dando, las economías desarrolladas no han logrado generar inflación, que era el principal sustento para comenzar con el ciclo alcista de tasas de interés y el retiro de los estímulos monetarios. Es por ello, que el ciclo alcista de tasas, que ya estaba de alguna manera incorporado en las valorizaciones de los activos financieros podría ocurrir en una velocidad mucho menor y con ello, los retornos esperados de muchos activos podrían cambiar. Por ejemplo, en la última reunión de la FED, los miembros dejaron entrever que, a pesar del crecimiento económico, el camino de normalización de la política podría ser más lenta.

Con los bancos centrales teniendo aún protagonismo en los mercados financieros y con el “Trump Trade” bastante desgastado, tendría sentido seguir pensando que la tesis de Mohamed A. El-Erian tiene vigencia.

Gran parte del retroceso en el valor del dólar este año se debe a estas tendencias. En lo que va del año, el dólar ha caído cerca de 7% versus la canasta global de monedas, lo cual podría seguir siendo la tendencia en lo que resta del año.

Artículo publicado en El Comercio.

Mercados y ciclo económico

Julio 6th, 2017 by

Cuando se maneja un portafolio de inversiones existen tres niveles de decisión. El primero es la elección de la clase de activo, por ejemplo, decidir entre invertir en acciones o en bonos, o en todo caso cual será la proporción de cada uno dentro del portafolio; en este caso, el análisis depende en gran medida de la evaluación de los ciclos económicos. El segundo nivel es la selección de los instrumentos dentro de cada clase de activo, es decir, decidir por ejemplo qué acción específica o qué bono comprar; en este caso la evaluación depende más de los modelos de valorización de un instrumento en particular. Por último, el tercer nivel es el “timing”, es decir, escoger el momento oportuno para comprar un instrumento.

Diversos estudios señalan que la fuente de generación de valor más importante en el largo plazo es el primer nivel. Elegir un posicionamiento adecuado en la clase de activo podría determinar aproximadamente el 90% del valor, siendo esta la decisión más importante para el manejo de los portafolios.

En un ciclo económico recesivo o de bajo crecimiento, normalmente los activos de renta fija tienen un mejor desempeño que los de renta variable. Ello porque los primeros responden positivamente a la disminución de las tasas de interés, que reaccionan ante menores expectativas de inflación y políticas monetarias contra cíclicas de los bancos centrales; mientras que los activos de renta variable tienen un desempeño pobre, pues se ven afectados negativamente por las menores utilidades esperadas de las empresas.

Por otro lado, en un ciclo de expansión económica, normalmente los activos de renta variable tienen un mejor desempeño que los de renta fija. Ello porque los primeros se benefician por las mejores perspectivas de utilidades de las empresas; mientras que los activos de renta fija se perjudican por el ciclo alcista de tasas que resulta de una mayor inflación esperada, así como de una política monetaria contractiva.

En la primera mitad del año, los rendimientos de los mercados internacionales se han alineado con las expectativas del ciclo económico. Por ejemplo, el mercado de acciones de EEUU ha rendido cerca de 9%, bastante superior al rendimiento promedio de los activos de renta fija, que fue cerca del 2%. Ello, mientras dicha economía está mostrando cifras sólidas de recuperación, y entrando en un ciclo alcista de tasas.

Por el lado local, los rendimientos de las clases de activos también han respondido de acuerdo con las expectativas del ciclo económico, que es algo diferente al que podríamos observar en los mercados desarrollados. En esta primera mitad del año, los activos de renta variable tuvieron un desempeño modesto cercano al 3%, aunque con diferencias importantes por sectores, en función de las menores expectativas de crecimiento económico. Por otro lado, los activos de renta fija tuvieron un desempeño mucho mejor en el mismo periodo, con retornos superiores al 7%.

Si bien no hay un consenso claro del momento del ciclo económico, la diferencia en los retornos de las distintas clases de activo da un indicio de las expectativas de los mercados. En el largo plazo, posicionar un portafolio de inversiones acertando a la dirección del ciclo económico, será la fuente de retorno más importante.

Artículo publicado en El Comercio.

Una política monetaria expansiva

Junio 13th, 2017 by

Las cifras de crecimiento de la economía peruana han sido revisadas considerablemente a la baja. Esto se debe, principalmente, a la paralización de la inversión privada explicada por la falta de ‘momentum’ y por los escándalos de corrupción ligados a las constructoras brasileñas. Ante este panorama, resulta importante que las políticas económicas estimulen la demanda interna.

El crecimiento de la actividad económica ha continuado desacelerándose en los últimos meses con un ritmo por debajo de su potencial y, por el momento, las esperanzas de recuperación económica se concentran en un aumento de la inversión pública y en mayores precios de los commodities que impactarían en un mayor valor de la producción minera.

Por el lado de la política fiscal, si bien existen los recursos suficientes para que esta sea expansiva (existe el Fondo de Estabilización Fiscal de S/30 mil millones que representa casi el 5% del PBI y un déficit fiscal aún en niveles manejables), el problema sería la capacidad y la velocidad de ejecución.

Por el lado de la política monetaria, el campo parece tener espacio para actuar. Desde hace varios meses, la inflación se ubica por encima del rango meta –entre 1% y 3%– del Banco Central de Reserva (BCR), principalmente por factores de oferta. Si bien esto siempre fue percibido como algo transitorio, pudo haber sido peligroso aplicar estímulos monetarios y el BCR actuó con cautela. Ya con la moderación de las expectativas de inflación y con los últimos datos publicados, en los que esta se muestra en niveles bajos, el BCR ha mostrado una intención de inyectar estímulos.

Desde comienzos del año, el BCR ha venido reduciendo la tasa de encaje, con el fin de buscar condiciones crediticias flexibles en el sistema financiero, en un contexto de desaceleración de la demanda del crédito. En la misma línea, el mes pasado decidió reducir en 0,25% la tasa de referencia, la cual había estado estable en 4,25% desde algunos meses. Para muchos, esto significó el comienzo de un ciclo de recorte de tasas, y es posible que este continúe en los próximos meses ante la necesidad de darle mayor estímulo monetario al alicaído crecimiento económico y mientras la inflación se mantenga por debajo del 3%.

Si bien el BCR tiene espacio para estimular la economía con recortes de tasa, el espacio no sería tan amplio, pues el nivel actual de 4% no es tan alto, sobre todo si se compara con las tasas de referencia del resto de países de la región.

Adicionalmente, el espacio sería menor si se toma en cuenta que los países desarrollados están en un ciclo monetario distinto, en donde la tendencia estaría más enfocada en el retiro de los estímulos. Por ejemplo, en un contexto en el que EE.UU. está en un ciclo alcista de tasas, mientras que el BCR está bajando sus tasas, la compresión en el diferencial de tasas podría tener un impacto negativo en el tipo de cambio, lo que se podría traducir en un rebote de la inflación y, de esta manera, anular la posibilidad de continuar con un ciclo monetario expansivo en la economía peruana.

Artículo publicado en El Comercio.

El riesgo político brasileño

Mayo 25th, 2017 by

En las últimas semanas, los riesgos políticos han seguido marcando la pauta para el desempeño de los mercados financieros. Esta vez fue Brasil, cuya crisis política alcanzó su pico en los últimos días luego de que se diera a conocer un audio en el que el presidente Michel Temer presuntamente negociaba el pago de un soborno. Ese día, los mercados financieros reaccionaron drásticamente: la bolsa brasileña cayó más de 10% y el real brasileño, 8%.

Temer asumió el cargo de presidente hace menos de un año de manera interina, luego de que la presidenta Dilma Rousseff fuese destituida en medio de una grave crisis económica y política en Brasil, con escándalos de corrupción explotando a todo nivel.

En medio de esta crisis, el gobierno de Temer estaba haciendo un buen trabajo en el manejo económico, llegando a controlar los niveles de deuda e inflación y enfocándose en hacer las reformas necesarias para sentar las bases de un crecimiento más sólido. A pesar de algunos cuestionamientos hacia Temer, los analistas veían con optimismo su gobierno, pues se consideraba que este sería clave para crear conciencia de que eran necesarias una serie de reformas económicas para que el país pueda estabilizar sus finanzas públicas y ser más competitivo.

Si bien su popularidad ya era muy baja, ello se explicaba principalmente porque las reformas que estaba tratando de impulsar eran impopulares en el corto plazo, pero al mismo tiempo ofrecían un alto beneficio para el país en el largo plazo. Entre ellas, la reforma del sistema de pensiones. Para un país en donde el costo de las pensiones públicas representa casi el 40% del gasto fiscal, es insostenible este sistema y reformarlo resulta crucial para lograr una estabilidad fiscal y un crecimiento económico sostenible. La esperanza era que Temer, que no tenía intenciones aparentes de reelegirse como presidente, tendría los incentivos para hacer las reformas necesarias, que un político tradicional no las hubiese priorizado, pues estas tienen un alto grado de impopularidad en el corto plazo.

De acuerdo con los analistas políticos, antes del último escándalo, era bastante probable que Temer hubiese logrado aprobar las medidas. Sin embargo, en este nuevo contexto ya no tendría el apoyo político suficiente y las reformas planteadas podrían quedar en el aire, y por ende el futuro económico de Brasil no sería tan optimista. En caso de que el mandatario pueda sortear las acusaciones y permanecer en el cargo, el daño político ya habría sido muy grande, por lo que su gobierno se debilitaría. Por otro lado, en el caso de la elección de un nuevo presidente para cumplir el resto del mandato hasta el 2019, las condiciones de gobernabilidad podrían seguir siendo limitadas.

El panorama político en Brasil hoy es más complejo e incierto que hace un año, cuando el Congreso estaba considerando la acusación de Rousseff. La incertidumbre política y la duración de esta serían muy nocivas para el país más grande de la región. Por lo tanto, es indispensable que los problemas políticos actuales se resuelvan con rapidez, lo cual no se ve muy probable.

Artículo publicado en El Comercio.

Riesgos políticos

Mayo 12th, 2017 by

En Europa aún se avizoran algunos otros riesgos tras la elección en Francia, sostiene nuestro columnista.

Luego de los resultados electorales en Francia, la calma volvió a los mercados. La elección de Emmanuel Macron significó la disipación de uno de los principales riesgos conocidos que se vislumbraban en Europa este año. Sin embargo, no es el único riesgo que deberíamos considerar.

En años anteriores, la atención de los mercados estuvo centrada principalmente en las dudas sobre el crecimiento económico. Por el lado de EE.UU., la incertidumbre era sobre si la primera economía del mundo podía salir de la recesión y al mismo tiempo normalizar su política monetaria. Por otro lado, el crecimiento de la economía china era otra gran preocupación, pues se pensaba que el cambio en su modelo económico podría tener un impacto material en el dinamismo de su PBI y, con ello, en la economía mundial. Sin embargo, esto no ocurrió.

En cambio, desde el año pasado, los riesgos políticos han tenido mucho más peso en las decisiones de inversión de los administradores de portafolios. El primero fue el ‘brexit’ y el segundo fue la elección de Donald Trump en EE.UU. Ambos eventos tomaron por sorpresa a los mercados, pues les habían asignado una probabilidad muy baja de ocurrencia.

Este año, al igual que el anterior, los riesgos políticos se han concentrado en EE.UU.y en Europa. Por el lado de EE.UU., el riesgo político sigue siendo la consecuencia de la elección de Trump. La nueva administración genera riesgos internos, principalmente un Congreso que podría frenar algunas de sus propuestas económicas, como la reforma tributaria, y también riesgos externos, que son los más importantes, como su política comercial y su postura beligerante con Corea del Norte.

En el caso de Europa, aún se avizoran algunos otros riesgos tras la elección en Francia. Por un lado, Macron, el presidente electo, podría tener complicaciones en el caso de que los movimientos extremos puedan ganar una mayoría en las próximas elecciones parlamentarias. Por otro lado, los riesgos del ‘brexit’ aún no se han materializado y dependerán en gran medida de las negociaciones de salida entre los gobiernos del Reino Unido y Europa. Italia podría ser otro factor de riesgo, pues luego de la salida de su primer ministro el año pasado, existe el riesgo de que algún movimiento populista pueda ganar las próximas elecciones. Por último, en Alemania, la primera economía del bloque europeo, hay elecciones hacia el final del año. Si bien en este caso lo más probable es una victoria de Angela Merkel, el surgimiento de algún candidato antisistema podría generar problemas. Aunque a esto último habría que asignarle una probabilidad baja, el impacto negativo si ocurriese sería considerable.

Si bien resulta relativamente sencillo identificar los principales riesgos, muchas veces el surgimiento de riesgos no identificados previamente o la subestimación de la probabilidad de ocurrencia de aquellos ya conocidos es lo que termina causando mayores daños.

Artículo publicado en El Comercio.

Mercados europeos

Mayo 3rd, 2017 by

Los riesgos políticos tuvieron una mayor ponderación en las decisiones de inversión en los mercados europeos, señala Marrero

En los últimos años invertir en el mercado europeo ha sido una tarea complicada, pues su volatilidad no ha sido para tomarla a la ligera. Por ello, muchos inversionistas adversos al riesgo se han mantenido alejados de la región. Con esta volatilidad, el mercado europeo ha presentado muchos retos y oportunidades, y sin duda, el inversionista dispuesto a invertir allí ha tenido que estar dispuesto a asumir mucho riesgo.

En el 2011, la crisis financiera estalló en Europa y se propagó principalmente por su periferia, donde estaban las economías más débiles. Aquella fue sobre todo una crisis financiera que estalló como consecuencia de que los países de esta región vivieron muchos años gastando mucho más de lo que produjeron. En ese momento se acuñó el término peyorativo ‘PIIGS’ (en referencia a la palabra ‘cerdos’), para referirse a Portugal, Italia, Irlanda, Grecia y España, en contraposición a la solidez de los BRICS (ladrillo), grupo de países emergentes que mostraban mucho mejores perspectivas. La fragilidad financiera de los PIIGS provocó un bajón muy fuerte en los mercados, pues se pensó que iban a caer en bancarrota y, al mismo tiempo, serían forzados a retirarse de la Eurozona. Finalmente, por medio de una serie de reformas económicas y en algunos casos un salvataje financiero por parte de las grandes economías de la región, este problema financiero fue superado. Ahora esas economías se encuentran con una buena salud financiera y su capacidad de pago ya no está en duda.

En los años posteriores, la Eurozona pudo salir del bajo crecimiento, y las cifras económicas mostraban una seria recuperación. Sin embargo, los inversionistas se mantuvieron bastante cautos ante la expectativa de más problemas, los cuales ya no eran financieros, sino más bien políticos. Las reformas económicas y luego las políticas migratorias de la Unión Europea generaron el surgimiento de movimientos en diversos países que desestabilizaron el panorama político. Algunos de ellos no prosperaron, como Podemos en España; algunos estuvieron bastante contenidos, como en Grecia, y el caso más crítico hasta el momento fue el ‘brexit’, que sí logró su cometido.

Esta inestabilidad política genera nerviosismo para los inversionistas. A pesar de los buenos fundamentos macroeconómicos y de las buenas perspectivas, los riesgos políticos tuvieron una mayor ponderación en las decisiones de inversión y, por ello, los mercados europeos rentaron mucho menos que otros en los últimos años. Ello generó un valor escondido que, para un inversionista dispuesto a asumir volatilidad, podría generar una gran oportunidad.

Lo que hemos visto en los últimos días, luego de los resultados de la primera vuelta en Francia, es justamente la realización de parte de este valor oculto luego de la posible disipación de uno de los riesgos que se vislumbraban en Europa este año: que ganara un candidato de extrema derecha con posiciones separatistas que intenten desintegrar la Unión Europea. De confirmarse este resultado en la segunda vuelta, podríamos ver mayores subidas en estos mercados.

Artículo publicado en El Comercio.